08 agosto 2006

La Búsqueda

Salió corriendo a la calle y comenzó a golpear las puertas de sus vecinos, ninguno supo decirle donde estaba.
Llamo a familiares, amigos y compañeros pero no obtuvo respuesta.
Revisó armarios, el sótano y el altillo, detrás de la cortina del baño y debajo de la alfombra del living pero no la encontró.
Abrió todos los cajones, cajas, cajitas y latas.
Hurgó entre las paginas de libros nuevos, viejos, prestados, robados, de terror, de química, de filosofía pero no estaba allí tampoco.
Abrió sobres, miró entre pilas de papel, en cartas, en los cestos de basura y nada.
Busco en la copa de los árboles, entre los arbustos, en el rosal y se desespero rasguñando la tierra y cavó, cavó muy hondo, en varios sitios del jardín.
Revisó en los bolsillos del saco, nada había y lo tiró. Tampoco en la billetera. El pantalón también fue descartado.
Desnudo cayó de rodillas sobre uno de los montículos de tierra removida que rodeaban ahora la casa y por un instante se rindió, pero enseguida la idea se disparó en sus ojos.
Comenzó a arañarse el pecho denudo, sangró, gritó, sufrió, pero siguió arañando hasta que no quedó piel para rasgar. Entonces siguió con la carne, pedazo a pedazo, hasta que pudo ver sus costillas, entonces empujo su mano entre ellas y con un alarido tomó su corazón en el puño y lo sacó de su cuerpo.
Miró el órgano bañado en sangre y sin pensarlo se lo metió en la boca y lo desgarró con los dientes hasta partirlo en dos.
Con un último tirón el trozo de carne se partió en dos y ella cayó de su interior sobre la tierra removida bañada en sangre.
La había encontrado, ahí estaba, por fin, pero la emoción duró muy poco, ella ya estaba muerta hacía mucho tiempo.

Dr. CroW

Anonymous Anónimo:

Magnánimo.....
Emocionante......
Que loco.

LKS*

13:40