12 septiembre 2006

El Devorador De Pecados


Es extraño, algunas veces el proceso lleva solo unos minutos y otras puede llevar horas para finalizar.
Solo describiré los síntomas en mi cuerpo, los que transitan mi mente los guardaré para mi.
Al principio es la taquicardia, puedo sentir como mi corazón salta de un lado al otro, excitado, como si quisiera pelearse con los órganos que lo rodean. Luego puedo sentir la sangren hervir y recorrer cada centímetro de mi cuerpo. Es increíble, es esos momentos tengo conciencia de cada punto que es recorrido por mi sistema circulatorio, puedo sentir y escuchar el torrente fluir de un lugar a otro.
Acto seguido llegan los temblores, siempre comienzan en mis piernas para llegar hasta mis manos y luego los calambres, no son calambres normales, es mas bien como si los músculos se convirtieran en piedra, literalmente.
Me abordan simultanéamele sensaciones de frió polar y calor infernal en distintas partes de mi cuerpo a tal punto que pienso que voy a destemplarme como un trozo de metal y a partirme en mil pedazos.
Entonces quedo allí paralizado, a veces por minutos y a veces por horas, presa del dolor y el pánico, sin saber si estoy realmente conciente. Es en ese momento en el que me doy cuenta que debo ser mas cuidadoso con las cosas que como.

Dr. CroW