En El Bar De José
Ocupa una mesa frente a la suya y no puede dejar de recorrer su cuerpo con la mirada. Es tan diferente a lo que está acostumbrado y sin embargo lo atrae tanto.
“No se compara con ninguna de las mujeres con las que he estado” piensa sin dejar de jugar con los sobrecitos de azúcar que acompañaban su café, ya congelado, sin tocar sobre la mesa forrada en un nailon pringoso de dibujos descoloridos.
Finalmente se decide y se acerca, si hay algo bueno que tiene la edad es que uno sabe lo que cuesta el tiempo y no está dispuesto a perderlo.
“Ma sí, yo me juego” retumba en su cabeza mientras se acerca esquivando las sillas.
Se miran a los ojos con detenimiento, está seguro que desde ahí abajo adivina sus intenciones. Y es que lo que piensa lo piensa tan fuerte que está seguro de que se oye en todo el bar. Acerca su rostro al suyo sin mediar palabras y se besan apasionada, desenfrenadamente.
En el Bar de José se hace un gran silencio, solo el fútbol en la grasienta TV pone ruido de fondo a la escena, todos observan a la pareja atónitos. “Viejos putos” dice alguno, y el murmullo habitual inunda de nuevo el lugar, todos siguen en su rutina, excepto ellos.
“No se compara con ninguna de las mujeres con las que he estado” piensa sin dejar de jugar con los sobrecitos de azúcar que acompañaban su café, ya congelado, sin tocar sobre la mesa forrada en un nailon pringoso de dibujos descoloridos.
Finalmente se decide y se acerca, si hay algo bueno que tiene la edad es que uno sabe lo que cuesta el tiempo y no está dispuesto a perderlo.
“Ma sí, yo me juego” retumba en su cabeza mientras se acerca esquivando las sillas.
Se miran a los ojos con detenimiento, está seguro que desde ahí abajo adivina sus intenciones. Y es que lo que piensa lo piensa tan fuerte que está seguro de que se oye en todo el bar. Acerca su rostro al suyo sin mediar palabras y se besan apasionada, desenfrenadamente.
En el Bar de José se hace un gran silencio, solo el fútbol en la grasienta TV pone ruido de fondo a la escena, todos observan a la pareja atónitos. “Viejos putos” dice alguno, y el murmullo habitual inunda de nuevo el lugar, todos siguen en su rutina, excepto ellos.
fue extraño...e interesante...y no se me ocurre otra cosa q decir:P
che..no fue mi intencion criticar a HPL...pero a veces se pasa con los adj., pero solo en eso.
Al igual que Homero, extraño e interesante, pero si se me ocurre que decir:
Quiero mas!
Apátika
Es un tema que creo que no habías tocado antes.
Me gusta.
Miralo vos al viejito!, este mas que salir del closet salió del ropero de la abuela!. Y yo que pense que el viejito le metería un tiro a alguien. Muy bueno.
no me puse a mirar fechas, pero me hizo acordar lo que Playo habia escrito acerca del gordito transexual que cumplía 15 :)
(lo de las fechas no es por plagio ni nada raro... soy así de catalogador)
Esto es posterior al "gordito quinceañero" :-)